Lo cierto es que los yogures ya no caducan como antiguamente, ahora lo que incorporan en su etiquetado es exclusivamente una fecha de consumo preferente. En nuestra opinión, esto resulta bastante positivo en el sentido de que se está evitando el anterior despilfarro de alimentos, ya que aparte de los yogures existen muchos otros alimentos que han cambiado en su etiquetado la fecha de caducidad por una fecha de consumo preferente. La vida útil de los alimentos se alarga.
España era el sexto país de la Comunidad Económica Europea que más alimentos y comida desperdiciaba, y por este hecho el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente decidió que diferentes alimentos y, en concreto, los yogures, dejaran de tener fecha de caducidad pasando a tener en su lugar fecha de consumo preferente.
La fecha de caducidad lo que señala es la posibilidad de, a partir de dicha fecha, exista el riesgo de que un determinado alimento ya no pueda ser consumido por haber desarrollado microbios o gérmenes perjudiciales para la salud.
La fecha de consumo preferente lo que indica es que, desde la fecha mencionada, el alimente podría haber perdido algunas de sus cualidades, de manera que podría llegar a saber un poco raro, haber perdido olor o incluso desprender un aroma raro, tener una color o textura diferente, etcétera, pero sin que estos cambios supongan un riesgo para la salud.
Esto es, sin duda, una muy buena medida del ministerio que ayudará a que no se desperdicien tantos alimentos que en realidad son perfectamente actos para el consumo. Muchos de nosotros, cuando los yogures tenían fecha de caducidad, los hemos consumido después de haber caducado y nunca nos ha pasado nada, más aún cuando un yogur malo es perfectamente detectable al meternos la primera cucharada en la boca por su sabor agrio.
Pero esto no solo es propio de los yogures, hay muchísimos alimentos que también se han unido a esta normativa y que ahora podremos consumir con la seguridad de que no nos va a pasar nada.
Por supuesto que con los alimentos y con lo que comemos hay que tener cuidado, pero lo que no se puede hacer es despilfarrar, más aun cuando hay tanta gente en el mundo que no puede llevarse ni un mendrugo de pan a la boca. Ahora podemos consumir yogures después de la fecha de consumo preferente con la seguridad de que nuestra salud no se verá afectada por este hecho… todos a comer yogures.
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